¿Ya tienes un canal YouTube y lo que quieres monetizar o tienes muchas ganas de empezar uno nuevo, pero no sólo por amor al arte, sino también como una actividad que genere ingresos?
En primer lugar, debes tener también muy claro que no existe “la” mejor fórmula(s) para generar ingresos de YouTube. Según el tipo de contenidos de tu canal y tus preferencias personales, las habrá que te encajan mejor o peor para tu caso concreto.
Para no dispersarme con mil fórmulas y separar el grano de la paja, me he centrado en las siete formas de ganar dinero más típicas, las que más gente usa y que seguramente sean también las que mejor te encajen a ti.
A partir de aquí, de sus carcterísticas, ventajas e inconvenientes que expongo a continuación, ya eres tú quien tiene que analizar cuáles te convienen más y por dónde empezar.
1. La publicidad online en YouTube. Google AdSense
Ésta es la vía más usada, pero también una de las menos rentables.
Y es que la publicidad AdSense en España se paga muy mal, y peor aún en los países latinoamericanos.
Ahora bien, tiene la gran ventaja de su simplicidad. Darte de alta es un proceso de minutos y el resto es prácticamente automático. Si consigues un canal con muchas visitas, aún mal pagada, tendrás una buena línea de ingresos.
Pero hay una traba:
YouTube exige un mínimo de 4000 horas de visualización en los últimos 12 meses y un total de 1000 suscriptores antes de habilitarte las opciones de monetización con AdSense en tu cuenta.
Por tanto, hasta que no superes estos umbrales, no podrás optar a esta fórmula de monetización.
2. Ingresos pasivos con marketing de afiliación
El marketing de afiliación es una fórmula en la que comisionas por las ventas que consigas con tus vídeos.
Toda gira en torno a los enlaces de afiliación y códigos promocionales personalizados (cupones descuento, etc.) que le proporciona la marca al afiliado.
La idea en ambos sistemas es que permiten que una marca sepa la web del afiliado de la que procede el usuario que ha realizado una compra, lo que les permite asignarle su correspondiente comisión.
Si el usuario compra en un plazo máximo establecido (que oscila típicamente entre 1 y 30 días), el afiliado recibirá una comisión por la venta.
En YouTube los enlaces de afiliación y código promocionales van en la descripción de los vídeos. Es muy típico que sean de Amazon o AliExpress, ya que ambas tiendas online tienen programas de afiliación.
Muchas veces vas a ver que el YouTuber te avisa de ello desde el propio vídeo. Y es precisamente para animarte a usarlos ya que, si vas directamente a la web del producto sin pasar por estos enlaces, la venta no quedará asociada al YouTuber en cuestión.
Así que ya sabes: si te cae bien un YouTuber (o bloggers como nosotros…) y quieres tener un gesto con el autor, usa sus enlaces de afiliación, le ayudarás a pagar sus facturas y siga creando contenidos para ti, y, además, te lo agradecerá mucho.

En el caso de nuestro blog, el marketing de afiliación es la vía de ingresos Nº1 de este blog, muy por delante de las demás (que son casi anecdóticas).
Las comisiones suelen oscilar típicamente entre el 5% y 50% del precio del producto. Esta última tasa del 50% se suele dar en productos digitales como cursos online, por ejemplo. En un producto físico o servicio, por razones obvias, es prácticamente imposible llegar a porcentajes tan altos.
Como ves, es una opción fantástica, muy fácil técnicamente y que puede llegar a ser muy rentable.
Un último consejo muy importante: sé honesto; no sólo te resultará ético, sino también rentable.
Busca entre los potenciales productos afines a tus contenidos (si no son productos relacionados con tus productos, apenas venderás nada) los mejores, (pruébalos a fondo, etc.) y recomienda sólo éstos.
Aquí tienes un “triple-win”: tu audiencia estará contenta (le has ahorrado tiempo y disgustos), el proveedor estará contento (tiene una venta) y tú también (tienes una comisión).
Si tu marketing de afiliación es así, te irá muy bien; hablo por experiencia 🙂
3. Colaboraciones con marcas. “Influencer marketing”
En YouTube, la colaboración directa con las marcas y el “influencer marketing” (cuando los colaboradores tienen estatus de “influencer”) es muy típica.
Y es que este tipo de marketing encaja especialmente bien con sitios con contenido audiovisual.
YouTube es el medio que más te permite conectar con tu audiencia y esto permite también aumentar la confianza de tu público en ti lo que es precisamente la gran baza de los influencers ante las marcas.
En el sentido amplio, la fórmula anterior que acabamos de ver, el marketing de afiliación también es una colaboración con marcas.
Pero cuando se habla de colaboración con marcas, en realidad, nos referimos a fórmulas de colaboración con un contacto más directo entre la marca y el YouTuber.
Aquí van algunos ejemplos:
- Patrocinios: muy usado en los podcasts; por ejemplo, con una pequeña cuña de la marca al principio, en medio o al final del audio.
- Product placement: es muy típico en YouTube que una marca pague al YouTuber por mostrar sus productos (un tutorial de uso, un análisis del producto, etc.). También se puede aplicar al podcasting, aunque encaja mejor en el formato vídeo.
- Merchandising: lo anterior, pero más discreto; se trata de que se vean los productos. Puede ser porque el YouTuber lleve ropa o accesorios de la marca, productos que tiene colocados estratégicamente (en la mesa, una estantería en el fondo, etc.) para que se vean “casualmente” en el vídeo, etc.
- Generación de leads para terceros: derivar leads y clientes. Por ejemplo: un YouTuber con un canal sobre mecánica de coches que deriva clientes a talleres colaboradores.
- Colaboraciones en eventos: el influencer puede ayudar mucho a aumentar la audiencia en los eventos y puede colaborar simplemente con su presencia, una entrevista, una charla, etc.
- Consultoría a marcas: pasar a ser un consultor de la marca para mejorar sus productos en base al conocimiento del influencer de su audiencia y el feedback que recibe.
4. Patrocinio de tu canal YouTube, podcast o página web
Los patrocinios son una de las fórmulas “clásicas” de generación de ingresos en el mundo de los negocios, que existen desde mucho antes inventarse Internet.
Esta fórmula se ha adaptado simplemente también a sitios web en los que puede encajar: blogs, canales YouTube, podcasts, etc.
Obviamente, aquí la cantidad y calidad de patrocinadores que vayas a encontrar y, con ello, tus ingresos, va a depender mucho de la fuerza de tu marca.
En cualquier caso, los números no son el único factor. Si quieres atraer patrocinadores, has de cuidar también la calidad de tu sitio web.
Esto quiere decir, cuidar cosas como:
- La calidad de tus contenidos.
- El diseño de tu canal.
- Tu nivel de actividad y visibilidad en las redes sociales.
Por otra parte, mentalízate de que las colaboraciones no van a llegar solas (salvo que seas un influencer de los importantes), debes buscarlos activamente. Si eres totalmente pasivo, es difícil que aparezcan por sí solos.
En esta tarea te pueden ayudar mucho algunas plataformas que ponen en contacto a influencers con marcas. Aquí tienes un listado de algunas de las más importantes:
5. Crowdfunding en YouTube vía Patreon
Otra idea muy original que te recomiendo encarecidamente que explores es la plataforma de crowdfunding Patreon.
Es una plataforma que le ha dado una vuelta de tuerca muy interesante al concepto de donaciones (algo que, generalmente, funciona muy mal cuando pones un simple botón de donaciones en tu web) y que está dando unos resultados sorprendentes.
Para entender cómo hacer esto y la idea detrás de Patreon, hay que saber que en Patreon hay dos tipos de miembros:
- Los creadores: son los autores de las obras (de todo tipo).
- Los mecenas (“patrons”): los fans que siguen a los creadores y quieren apoyarlos.
La idea es que, a través de Patreon, los fans de los autores pueden acceder a una variada serie de privilegios que los creadores ponen a su disposición, a cambio de un pago periódico (realizado vía Patreon).
Estos privilegios pueden ser todo tipo de cosas como, por ejemplo, contenido exclusivo, contacto directo con el creador, etc. Es básicamente una cuestión de la creatividad del autor para dar con fórmulas atractivas para su público.
Se pueden establecer, y es muy interesante hacerlo, niveles de acceso (tiers) para adaptarse a todos los bolsillos.
Sin embargo, habiendo también niveles de contribución más altos, está claro que la cifra real tiene que ser superior.
Para el cálculo final hay que restar una pequeña comisión (el 5% en este momento) que se queda Patreon, el resto (el 95%) es para el creador.
Una solución genial y muy elegante para todos los implicados, ¿no te parece?
6. Las membresías de YouTube (Botón “Unirse”)
YouTube están ampliando últimamente las vías de monetización que ofrece a sus creadores de contenido (los YouTubers). Una fórmula relativamente nueva son las membresías (“sponsorships” en inglés).
Puedes reconocer los canales que usan las membresías de YouTube fácilmente por el botón “unirse” que aparece al lado del botón del canal para suscribirse, como lo puedes ver arriba en este post en la captura del canal de “El Rubius”.
Aquí te dejo un pequeño tutorial sobre las membresías de YouTube. Está en inglés, pero recuerda que puedes activar subtítulos con traducción automática al español en la configuración del reproductor (la ruedecita):

Para simplificar, podemos decir que se trata de una idea “fuertemente inspirada” en Patreon, aunque implementada de una manera más pobre, entre otras cosas, porque en, este momento, sólo permite un nivel de pagos (4,99€).
Otro tema importante para analizar sería la actitud de tu público: veo probable que le genere más simpatía pagar a Patreon que a YouTube, pero esto es sólo una opinión subjetiva mía que, por ahora, no he contrastado con datos. El tiempo dirá…
7. Vender tus propios productos y servicios en YouTube
Este último punto es bastante evidente, por eso no voy a profundizar mucho en él. Ya hemos visto ejemplos de ellos en los YouTubers antes mencionados.
El producto por excelencia suelen ser los cursos online. Y es que tienen muchas ventajas: encajan en muchísimas temáticas y, sobre todo, escalan de forma perfecta por ser una venta altamente automatizable.
Es decir, una vez creado, la diferencia en esfuerzo de vender 10 a vender 1000 no es 100 veces más, es sólo un poquito más.
Puedes vender tus cursos directamente desde plataformas de venta, aunque yo te recomendaría ir un poco más allá y crear una web dedicada para tus cursos y/o un blog, con un apartado para tus cursos.
Esto te dará mucho más juego y tendrás ya la infraestructura para hacer algo muy, muy importante que te comentaré más abajo: llevarte tus seguidores en YouTube a tu lista de correo.
Un truco clave para aumentar drásticamente tus ingresos en YouTube
En muchas de las fórmulas de monetización que hemos visto en el apartado anterior, necesitas o, al menos, te conviene usar enlaces en la descripción del vídeo.
El quid de la cuestión es el siguiente: es vital que puedas medir los clics que reciben estos enlaces. Si lo haces, aumentarás drásticamente tus ingresos. En un segundo verás por qué.
Hay muchas herramientas para medir clics, una de las maneras más sencillas es con una cuenta en acortadores de enlaces que tengan un panel de estadísticas como lo incluye.
Esto es así por varias razones, pero quiero destacar, sobre todo, dos:
- Te permite saber qué productos funcionan y cuáles no.
- Es un arma muy poderosa en las negociaciones con las marcas.
Con respecto al primer punto, por mi propia experiencia con el marketing de afiliación, por ejemplo, te puedo asegurar que es muy complicado predecir qué grado de éxito tiene un producto con tu audiencia. Realmente la única manera fiable de averiguarlo es probar y medir.
Por eso, si usas enlaces a productos, es muy importante hacer un seguimiento de los clics para ver qué tal están funcionando, además, no funcionarán igual según que vídeo. En definitiva, aquí siempre hay un gran margen de optimización que se traduce en aumento de ingresos.
Con respecto al segundo punto, te puedo poner como ejemplo las colaboraciones con marcas donde el YouTuber negocia directamente con la marca un precio por crear un vídeo sobre uno de sus productos sin hacer marketing de afiliación.
Muchos YouTubers cobran cifras muy inferiores al verdadero valor del video para la marca, especialmente si no tienen aún categoría de gran “influencer”.
Aquí el problema clave es que el YouTuber pueda demostrar la efectividad de sus vídeos para la venta de los productos. Eso va a ser lo que le dará fuerza en las negociaciones, poder demostrar los resultados que es capaz de obtener.
Las reproducciones del vídeo son un parámetro importante en ello, pero siempre queda la incógnita de cuánta gente va a visitar realmente la marca (la tasa de “conversión”). Y esa falta de información le permite a la marca presionar los precios a la baja, especialmente si eres un YouTuber pequeño.
Pues bien, si dispones de estadísticas de clics, rompes este argumento, puedes medir con precisión el grado de efectividad de tu vídeo para la marca y negociarás con mucha más fuerza (si tus resultados son buenos).
Además, te permite plantear acuerdos que no sean un pago único, sino un pago por clics, por ejemplo, que pueden ser mucho más atractivos a largo plazo para ti y la propia marca.
Y, por último, también te permite experimentar con tus vídeos (con diferentes maneras de remitir a los enlaces, por ejemplo) para ver cómo ir aumentando progresivamente la conversión de tus enlaces (la tasa de clics en tus enlaces).
Si superas estos obstáculos iniciales, te aseguro que te puede estar esperando algo muy grande, algo que se puede convertir en tu medio de vida y que te va a dar un nivel de satisfacción como muy pocas otras cosas en la vida.
¿Dudas? Coméntamelas en la sección de comentarios 🙂