Todas sufrimos de estrés de vez en cuando y cada uno de nosotros expresa y manifiesta el estrés de diferente maneras. Hay muchas formas de lidiar con el estrés – gritar, golpear un almohadón, golpear la pared, etc. – pero ninguna logra resolver la situación desde la raíz. Sin embargo, hablar con una persona en quien confíes, puede ser el comienzo de la solución al problema del estrés.
A continuación, compartimos los 5 tips que pueden ayudarte a combatir el estrés:
1. Gente No Tóxica
Cuando te sientas desbordado o necesites ayuda, intentá rodearte de personas que te quieran y que se preocupen por tu bienestar. Generalmente, cuando necesitamos hablar con alguien ya sabemos exactamente con quién queremos estar y hablar. Es importante hacerle caso a nuestra intuición. Y aunque no lo hayas pensado, quizás esa persona con la que hables esté pasando por la misma situación y juntos ayuden a encontrar la solución al problema. Hablar de los problemas y de las situaciones de estrés ayuda a sacar toda la carga emocional fuera del cuerpo – evitando que la angustia se acumule en el cuerpo y desarrolle dolencias físicas.
2. ¡Fuera Nervios!
Es fácil perder el control de tus sentimientos cuando estás enojado/a o te sientas frustrado/a. Date cuenta de tus sentimientos. Prestales atención y expresalos. Encontrá una forma sana de canalizarlos. Practicá ejercicios de respiración, escuchá música, escribí en un diario personal, jugá con una mascota, salí a caminar o a andar en bicicleta. Seguí tu intuición y tomate el tiempo para hacer lo que necesites hacer para sentirte mejor. Nadie te conoce mejor que vos.
3. Tratate Bien
Algunas veces cuando los niños están preocupados y disgustados, se desquitan con ellos mismos. Esto no es una buena idea. Recordá que siempre hay personas que pueden ayudarte. No te desquites contigo mismo. Tratate bien y buscá la ayuda o el apoyo que necesitas. Hacelo con amor y con paciencia. “Siempre que llovió, paró“.
- Álvarez Bueno, Rosana (Autor)
4. Encontrá La Solución
Cuando te hayas podido descargar y te sientas más tranquilo/a y te sientas con la energía necesaria, es momento para resolver tu situación. Primero es importante darte cuenta de cuál es el problema y cuál es la angustia que te está causando. Incluso si no puedes resolverlo completamente, quizás puedas comenzar a resolverlo poco a poco. No te des por vencido. Siempre hay soluciones.
“Si el problema no tiene solución, ¿para qué te preocupas?
Si el problema tiene solución, ¿para qué te preocupas?” (Proverbio Chino)
5. Sé Positivo – Todo Es Temporal
La mayor parte del estrés es temporal. Puede que el estrés no parezca temporal cuando estás atravesando la situación, pero el estrés puede desaparecer, generalmente cuando te das cuenta del problema y comenzás a tomar medidas para resolver lo que te preocupa.
Los cinco pasos que compartimos no son mágicos – y puede que tengas que repetir uno de los pasos más de una vez -, pero sí funcionan. Y si podés permanecer positivo(a) a lo largo del proceso, vas a poder encontrar la solución al problema y contrarrestar el estrés de manera más rápida y eficiente.